miércoles, 2 de diciembre de 2009

La capacitación a un Guía Montessori y la presentación de una lección

- Para que una persona pueda ser un guía Montessori, debe seguir los siguientes pasos:

1. Asistir por un año de estudios teóricos y prácticos.

2. Luego de recibir esta preparación, tiene que trabajar durante nueve meses a un aula Montessori.

3. Debe presentar de forma escrita 15 lecciones: 5 sobre filosofía Montessori, y 10 sobre el Desarrollo del niño.

4. Elaboración de 5 álbumes, cada uno sobre las cinco áreas que hay en el Método Montessori (Vida Práctica, Sensorial, Lenguaje, Matemática y Cultural).

5. Finalmente debe dar un examen teórico donde se presentan cien preguntas sobre la filosofía y áreas del Método Montessori, y un examen práctico donde se tiene que demostrar dos lecciones de cada área.

- Presentación de una lección

Se lleva a cabo cuando la/el guía le presenta los materiales y actividades a los niños en un ambiente Montessori, esto es llamado lección. Cuando un niño está listo para empezar el entrenamiento de sus sentidos, se les presenta una lección de manera individual. El/la guía invita al niño a trabajar y se sienta a su costado con un material que piensa que le interesará, luego realiza una demostración de la aplicación del material seleccionado, usando una interacción verbal mínima. La idea fundamental de la presentación de una lección es demostrar el uso de algún material en particular sin crear conceptos erróneos, confusiones o desatención en el niño, de este modo al satisfacer las necesidades internas del niño, éste dominará el material a través de la repetición del ejercicio.

Generalmente la primera lección es en silencio, poniendo toda la atención del niño en la técnica del uso del material y en forma breve. Si es necesario se usarán algunas palabras clave en su debido momento. Otra característica de la lección es su simplicidad, ya que no se debe tener nada que no sea la absoluta verdad; finalmente la tercera característica de toda lección Montessori es su objetividad, es decir, que todo guía debe olvidarse de sí mismo y enfoca toda la atención del niño en el material.

La/el guía debe darle una base al niño, pero después dejarlo libre para que se desarrolle. Nunca deberá insistir en que el niño repita el ejercicio ya presentado, no puede interrumpir su trabajo o confundir al niño, por ello se tiene que frenar de decirle que ha cometido algún error o que no ha entendido nada, ya que puede perjudicar su desarrollo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario